Una persona sin vida fue el resultado de la explosión de una toma clandestina en la comunidad de Xolostitla, en el estado de Hidalgo.
Alrededor de las 7:30 de la noche del miércoles comenzó una intensa movilización de cuerpos de auxilio y policiaco luego de que se reportó la explosión de un ducto en un camino de terracería.
Al lugar acudieron elementos del gobierno federal, Pemex, Sedena, Protección Civil de los municipios de Mineral del Monte, Mineral de la Reforma, Pachuca, así como cuerpo de Bomberos y Cruz Roja.
Durante varias horas se trabajó en el lugar y alrededor de las 9 de la noche se dio a conocer que había sido controlada la situación.
Al término se localizó el cuerpo de un trabajador de Pemex, quien estaba encargado de operar la retroexcavadora con la que se reparaba el ducto y quien fue alcanzado por el siniestro.
Las unidades acudieron en apoyo para el desalojo de los habitantes cercanos al incidente. Las llamas alcanzaron a ser visibles en varios kilómetros y desde municipios como Cuautepec y Singuilucan, lo que causó temor entre la población.
Se dio a conocer que al momento que sucedió el accidente el gabinete de seguridad del gobierno estatal estaba en reunión, por lo que al notificarse la emergencia se trasladaron al sitio las autoridades.
Esta madrugada, la Guardia Nacional implementó el Plan de Asistencia a la Sociedad en Casos de Emergencia (Plan GN-A), en el municipio de Epazoyucan, estado de Hidalgo, tras la explosión en el ducto Tula-Tuxpan de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Personal de la institución se trasladó al poblado de San Juan Tizahuapan, a la altura del kilómetro 230, donde se coordina con las autoridades de los tres órdenes de gobierno para salvaguardar la integridad de las familias que habitan en las inmediaciones del área siniestrada.
Al mismo tiempo, los guardias nacionales desplegaron un operativo de seguridad perimetral, con la finalidad de evitar que los pobladores se acerquen a la zona de mayor riesgo.
Con información de Contra Réplica.
