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Bienestar

¿El dinero te quema las manos?

Cómo dejar de comprar por compulsión y no morir en el intento

Típico que llega la quincena o el pago de lo que sea y te lo gastas en cualquier cosa, más rápido de lo que canta un gallo, ya no tienes dinero, ¿qué sucede que compras compasivamente? ¡Aguas! puedes ser tu peor enemigo y no se trata de una simple reacción.

Entendamos que el comportamiento compulsivo tiene una relación dopaminérgica importante, así es, generas dopamina al comprar, pero la consumes demasiado rápido, cada vez más, por ello la necesidad de volver a generarla aparece a la brevedad, además a ello, juega el hecho de que entre más la generes, más te desensibilizas a lo que en origen la generó. O sea, dicho en otras palabras, si compraste un auto y eso te hizo muy feliz y te dio placer, en pocos minutos querrás otro o te encontrarás pensando en el siguiente que comprarás…

Ahora el comportamiento obsesivo compulsivo tiene dos partes, primero la obsesión que es esa situación o hecho que te roba el pensamiento, te obsesiona. Mientras que la compulsión es la forma en la que lo resolverás, por ejemplo, tu obsesión puede ser la limpieza, mientras que la compulsión es ponerte gel antibacterial cada 5 minutos, ahí entra la relación dopaminérgica, porque sientes placer al controlar esa obsesión.

Sabiendo todo esto, qué tiene que ver con las compras, pues todo, quizá estás comprando como una respuesta evasiva que tomó fuerza en hábitos que no te permiten planear financieramente a largo plazo y que poco a poco, dejando de lado si son buenos o malos, te mantendrán atado, gastando a veces más de lo que tienes.

Pero además de as relaciones con neurotransmisores, debemos observar si tenemos un tema emocional que sume a la complejidad de los actos. Para ello es necesario que descubras primero si eres o no un comprador compulsivo. Por ejemplo, ¿Eres de los que se la pasa cachando ofertas en tiendas en donde son una constante? ¿Una vez que compras la satisfacción desaparece rápidamente y en automático buscas el nuevo disparador? ¿Tendes a evitar reuniones o convivencia por ir a comprar? ¿Te sientes ansioso si no compras? ¿No planeas nada y cuando lo haces rompes esa planeación por comprar? Si en la reflexión de tus respuestas encuentras conductas que no aportan a tu salud financiera, entonces es momento de tomar cartas en el asunto y acercarte a terapia, porque tu desmadrito financiero es más complejo que solo un tema de planeación, además recordemos que nuestra relación con el dinero es en gran medida un reflejo de nuestro estado emocional.

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