Es el segundo álbum de la cantante nacida en Huntington, New York, el 27 de marzo de 1962, y el que la llevó al estrellato mundial, que no ha dejado de gozar desde ese ya lejano 1991. Es Mariah Carey y Emotions, a 30 años de su estreno.
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Fue el 17 de septiembre que se puso a la venta el disco de Carey. Antes de ese, contaba con su debut homónimo de junio de 1990.
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Era un buen tiempo para la cantante, pues a Emotions también le benefició que, al año siguiente, tuvo exposición mundial por medio del concierto MTV Unplugged, en el que Mariah demostró sus dotes artísticas, cautivando con su extraordinaria voz y carisma.
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Si bien su primera placa le había abierto las puertas en la música estadounidense, fue con la segunda que demostró su enorme potencial y futuro. El disco ostentaba un lado más rítmico y sus singles fueron más up tempo que los de su placa anterior. Se generaba así un balance que le daba versatilidad.
El sencillo que da nombre al disco fue acertado, pues fue donde muchos conocieron uno de los trucos vocales más celebrados de Mariah Carey: la técnica de voz triple o registro de silbido, que es cualidad de muy pocos cantantes y requiere de un alto dominio de la técnica. A grandes rasgos, las cuerdas se cierran dejando sólo un pequeño orificio por el cual pasa el aire, similar a como lo hacen los labios al silbar y emitiendo un sonido alto. Se dice que es imposible emitir este sonido y articular palabras al mismo tiempo, más existen algunos videos donde Carey lo hace.
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En años posteriores, la carrera de Carey se centró más en estilos urbanos como el R&B y hip hop, limitando un poco el lucimiento y reduciendo las exigencias vocales; en sus inicios, sobre todo los discos de la década de los 90, los géneros eran más diversos, empleando influencias del góspel, el Rhythm and Blues y el soul.
La variedad arriba mencionada se puede apreciar a la perfección en el concierto Unplugged, en el que se emplearon 4 canciones de Emotions, 3 del álbum Mariah Carey y un cover agregado de último minuto, “I’ll Be There”, clásico de los Jackson 5 y que contó con la voz del invitado Trey Lorenz.
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Por su parte, Emotions tuvo tres sencillos promocionales: “Emotions”, “Can’t Let Go” y “Make It Happen”. Otro de los tracks, “If It’s Over”, fue coescrito con la legendaria Carole King, mientras que Mariah intervino en todas las letras.
El mejor despliegue artístico de Mariah Carey se puede apreciar en sus primeros cinco discos de estudio (así como Unplugged y Merry Christmas) de los cuales, Emotions es imprescindible.
