El año era 1986 y existían pocos grupos tan grandes como Mecano, trío español de art pop, conformado por los hermanos José María y Nacho, así como de Ana Torroja, cantante entre cantantes.
El fenómeno mundial nació con uno de los materiales de los cuales hablamos hoy: Entre el cielo y el suelo, lanzado el 17 de junio de 1986.
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Mecano contaba con tres discos previos, iniciando en 1982, más el de 1986 fue el responsable de su desmedido éxito que sólo vio fin cuando ellos decidieron terminar con el trío.
El nivel técnico de sus compositores, los hermanos Cano, así como la manera de entregar sus mensajes a través de la voz de Ana y sus arreglos musicales perfectos, los llevó a ser los más grande de su país, España y de una gran parte del mundo.
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Los sonidos de esa década eran dominados por lo electrónico, los sintetizadores, las baterías eléctricas. Era imposible no caer en sus redes. Mecano lo sabía y no rehuía a ello. Al contrario, manejaba los sonidos a su gusto para dar distintos resultados. Los Cano abordaban cualquier género musical, desde lo clásico hasta lo novedoso o lo muy popero. Siempre, creando arte.
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Entre el cielo y el suelo fue un monstruo de ventas. Y se explica sencillamente al descubrir los tracks que se encuentran en su interior: “Ay, qué pesado”, “Hijo de la Luna”, “50 palabras, 60 palabras o 100”, “Me cuesta tanto olvidarte”, “Las curvas de esa chica”, “No es serio este cementerio”, “Cruz de navajas” y “Esta es la historia de un amor”. Los mencionados son 8 de los 10 tracks que componen la producción. Resulta complicado elegir el más famoso de este disco de portada sencilla y cuya característica principal son los tonos azules de la nostalgia, muy presente en su interior.
Cuentos, tragedias, humor, amor, desamor y homenajes, eran sólo algunos de los temas que Mecano proponía en sus materiales.
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Por la misma fecha, pero 5 años después, los españoles presentaron su sexta –y última- producción de estudio, Aidalai, el 14 de junio de 1991.
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Como se dice, Mecano se fue en la cima y muchos esperaron el regreso que nunca se dio; tal vez podían haber dado más, más optaron por cerrar su ciclo. Y lo hicieron de la mejor manera con este disco.
Aidalai se escucha mucho más pulido y a la vez, igual de bien logrado que sus antecesores. El SIDA, la esclavitud, el Dalai Lama, así como el flamenco, la salsa, el pop y la música instrumental, tienen cabida en esta placa que resulta memorable.
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Algunas de las famosas composiciones contenidas en la grabación, son: “El fallo positivo”, “Tú”, “Naturaleza muerta”, “Dalai Lama”, “Una rosa es una rosa”, “Sentía”, “El 7 de septiembre”, “Bailando salsa” y “1917”.
Mecano fue un grupo de pop que gustaba de manejar la poesía tanto en las letras como en la musical. Si ya no los recordabas o, mejor aún, si no los conoces, este puede ser un buen momento para hacerlo.
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Entre el cielo y el suelo cumple 35 años y Aidalai, 30.
