Las arcas públicas dejaron de recibir 55 mil 123 millones de pesos por operaciones simuladas, realizadas por un grupo de 43 empresas, denunció este día la jefa del Servicio de Administración Tributaria, Raquel Buenrostro.
Detalló que para determinar ese monto se revisaron 22 millones de facturas emitidas en las que están involucradas un universo de 8,212 empresas.
Los 55 mil 123 millones corresponden a 11 mil 396 millones del Impuesto al Valor Agregado, 24 mil 853 millones de Impuesto Sobre la Renta así como 19 mil millones de pesos de ISR que debió retenerse por salarios.
Las empresas constituidas para emitir facturas apócrifas con frecuencia ofrecían documentos por productos de difícil fiscalización, como comsumibles y servicios, detalló Raquel Buenrostro.
Raquel Buenrostro reconoció que no podrán recuperar la totalidad el monto presuntamente defraudado al fisco, pero iniciarán estrategias para recuperar una parte e inhibir la conducta en el futuro.
Al respecto, el Procurador Fiscal de la Federación, Carlos Romero Aranda, anunció que este día se interpondrán siete querellas contra los grupos principales de empresas facturares por los delitos de defraudación fiscal y lavado de dinero.
Así, explicó, buscarán equiparar la actividad de las “factureras” con delincuencia organizada.
Además se hará un exhorto a las personas físicas y morales que realizaron operaciones con las empresas catalogadas como “factureras” para que regularicen su situación fiscal, bajo el entendido de que actuaron de buena fe sin conocer que hacían una operación con una empresa dedicada a la defraudación.
En caso de no se regularicen en un periodo de tres meses, se presentarán querellas pues se asumirá que hubo contubernio, agregó Carlos Romero Aranda.
