Es muy cierto que todo se resume a ciclos, el inicio de uno laboral es emocionante, pero el final quizá no tanto. ¿Comienzas a notar las cosas más raras de lo normal? Quizá te van a correr y ni cuenta te estás dando.
¿Es a mi?
Dejaste de ser un mueble y ahora curiosamente eres la lámpara principal de la sala, y todos quieren saber cómo haces tu chamba; cada proceso y cada detalle es ahora fascinante.
Papelito habla
Se terminó eso de pedir las cosas “en corto” o por llamada, nel ahora todo es por escrito por favor, ¿por qué será? pues quizá necesitan documentar tus actividades, funciones o acciones, es evidencia que puede ser usada en un proceso legal laboral. ¿Te pidieron ya a caso la elaboración de tu perfil de puesto, responsabilidades y alcances para que cualquiera que lo lea lo entienda?
Bipolaridad presente
Pues o todo está agarrado con alfileres y apunto de desmoronarse con cualquier “shhhh” o todo es perfecto y como en un sueño; aguas con los ¡no te preocupes, todo está OK, no pasa nada”, “a todos nos pasa”, “relax”.
Mobbing a la vista, bañista
¿El clima laboral está un poco cargado de negatividad directa, es imposible que salgas a en tu horario normal, tienes exceso de trabajo, presión sobre las entregas, aumento de responsabilidades, represiones y regaños sin fundamento, o de plano han comenzado a no darte chamba, de pronto te excluyen de las juntas, nuevos proyectos, planeaciones de tu área y cosas a las que estabas integrado? a eso se le llama mobbing y es como el bullying pero en el trabajo, quizá quieran una renuncia por desesperación.
Radiopasillo suena
Y es que las paredes hablan, todos tienen presentimientos y como que las vibras se mueven, tanto que tu sexto sentido no te engaña.
¡Pero no todo es malo, debes hacer de las posibilidades una oportunidad!
Realmente ningún trabajo es para siempre, y si piensas eso ¡qué flojera!, cuando un ciclo está por terminarse, debes ir preparando tu mente para el que viene, y si te agarra desprevenido, que a todos nos ha pasado o pasará, pues no hay más que tomar el toro por los cuernos. No lo tomes personal, aunque pienses que lo sea, muchos de los despidos laborales se deben a recortes de presupuesto. A veces hasta doloroso es cuando al jefe le piden las “cabezas” de unos cuantos, porque todos son buenos elementos. Pensar en que nadie es indispensable y todos somos prescindibles, te ayudará siempre a mantener tu mente abierta a cada posibilidad, estar alerta a las oportunidades y aprender a decir “a otra cosa mariposa” sin apegos, sin rencores y siempre muy positivo, porque lo que hoy unos dejan ir, otros ya lo están necesitando.
