La firma surcoreana se ha visto nuevamente en problemas. La noticia ha corrido como pólvora ya que ahora se ha conocido que a un usuario de Corea del Sur le explotó su Samsung Galaxy S10 5G.
Por desgracia al propietario del dispositivo no le han reembolsado su dinero, ni tampoco le han reemplazado su smartphone.
Este hecho podría suponer un fuerte revés para la firma ya que la explicación de la empresa no ha gustado mucho a los usuarios y es que la explosión de este terminal.-según ha afirmado la compañía-, no ha sido culpa de un defecto en el diseño. Samsung ha afirmado que la explosión se debió a un “impacto externo”.
Recordemos que en el año 2016, Samsung estuvo en el ojo del huracan debido a la explosión de uno de sus terminales, el Samsung Galaxy Note 7. Incluso la mayoría de las aerolíneas prohibieron su portabilidad en vuelos, lo que también derivó en la decisión de la compañía surcoreana para retrasar el lanzamiento del Galaxy S8.
Otro de sus dolores de cabeza ha llegado con su smartphone plegable, el Samsung Galaxy Fold, cuya salida tendrá que esperar un poco más debido a los problemas detectados con las pantallas de sus unidades de prueba. Pero esa es harina de otro costal.
Lo cierto es que Samsung no se encuentra en su mejor momento.
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