Publicidad
Local

Cerdo y achiote, bomba

La cochinita pibil es, como mucha de la cocina mexicana,  una exquisita fusión cultural  española y maya; este platillo de pulpa de cerdo marinada en achiote, jugo de naranja agria, ajo, sal y pimienta, se cocina en un hoyo en el suelo, sobre piedras calientes.

 

Tiene sus orígenes en la época prehispánica, se preparaba para la celebración más importante el Hanal Pixán, en la que se ofrenda comida y bebida a las almas de los fieles difuntos del 31 de octubre al 2 de noviembre.

Entre sus principales ingredientes están el achiote,  un árbol originario que produce un fruto que parece una cápsula de 5 centímetros aproximadamente, cuando madura salen unas semillas rojas que se mezclan para formar una especie de pasta anaranjada y sirve como condimento para diferentes platillos. Las culturas mayas también lo utilizaban como repelente de insectos, colorante de tejidos y pintura corporal durante sus rituales y ceremonias.

En el caso de la carne tenemos que la manifestación de este animal se encumbra a 40 millones de años, según restos encontrados en Europa y Asia, su origen se encuentra en el jabalí. En el 1600, Hernán Cortés los introdujo a México y con esto la producción de cerdos comenzó a extenderse.

La comida mexicana es, desde cualquier perspectiva, maravillosa ya que está cubierta del sincretismo que no da identidad.

En México la producción nacional por año es de más de un millón 500 mil toneladas, con lo cual se satisface 60% del consumo nacional; se producen 638 toneladas anuales de achiote y son Quintana Roo, Yucatán y Tabasco las entidades productoras de este alimento.

Publicidad

Deja un comentario

Back to top button