Hay bandas musicales para cada generación: The Beatles, The Eagles, Depeche Mode, Radiohead. En su caso, Muse es una de las más representativas de su tiempo. Su primer disco, Showbiz, salió a la venta el 7 de septiembre de 1999 en Francia y posteriormente, el 28 en Estados Unidos para finalmente debutar en su propia casa, Reino Unido, el 4 de octubre.
Con esa primera entrega descubrimos a una nueva musa (Muse) del rock. Su estilo era más áspero, más alternativo y menos estructurado de lo que llegaría a ser con el paso del tiempo, la experiencia y los discos.
Muse jugaba más con el rock noventero del The Bends de Radiohead que con el sesentero de The Who y Tommy. Eventualmente, los combinarían a la perfección. La placa es una colección de canciones “antiguas”, que ya eran parte del grupo desde unos cuatro años antes. Las juntaron, las pulieron y las grabaron en sesiones que comprendieron un lapso de casi dos meses.
En el resultado escuchamos a un Muse maduro, seguro y casi definido, elementos necesarios para llamar la atención y ser tomados en cuenta. Tiempo después llegaría lo teatral, los crescendos, la –casi- ópera rock. Por lo pronto, era un grupo dispuesto a demostrar que tenían lo necesario para entrar al Show Business.
Al principio se les criticó por sonar al antes mencionado Radiohead con los falsetes de Matt Bellamy, mas Muse demostró que tenían su propia propuesta y tras los años, Showbiz también fue recibiendo mejores críticas. Hoy en día, Muse es de los pocos grupos que siguen manteniendo la bandera de rock en alto, con 8 materiales de estudio, siendo el último, Simulation Theory de 2018.
El trío fraguado en Devon, Inglaterra, lanzó la gran cantidad de 6 sencillos en un periodo de un año y fueron aclimatando a su público para lo que sería el enorme suceso de Origin of Symmetry en 2001, que los convirtió en un grupo de corte mundial. A la fecha, siguen haciendo buenas producciones, pero Matt Bellamy, Chris Wolstenholme y Dominic Howard tomaron al mundo con esta primera producción, que ya cumple 20 años. Y se sigue escuchando estupendamente.
