Entre las propiedades de relativamente reciente creación de Disney Pictures, se encuentra una favorita de ya varias generaciones. Su atractivo trasciende el cine, el punto de su origen, y ha generado una alta demanda por diversos productos, llegando a ser una pequeña -o gran- mina de oro. Todo surgió hace 20 años con Lilo & Stitch.
Resulta difícil creer que tanto tiempo haya pasado desde que el filme llegó a las salas. Varias personas que eran niños o jóvenes en ese entonces, ya trasladan su gusto por la franquicia a sus propios hijos.
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Lilo y Stitch, tiene muchos puntos a favor comenzando porque los diseños de ese mundo, paraíso hawaiano, son redondeados. Las formas con estas características, sin puntas ni esquinas demasiado anguladas, se dice que transmiten una sensación de seguridad y calma.
Sticht, por su parte, es un gran diseño para un personaje por varios motivos. El extraterrestre se comporta de varias maneras y todas ellas apelan al gusto del ser humano. Por ejemplo, en ocasiones, Stitch es protector, característica que genera seguridad y confianza, sensación importante cuando el espectador baja la guardia durante un tiempo determinado para ver una película.
El extraterrestre azul es adorable, de ojos grandes; en ocasiones se comporta como niño, o como bebé, con momentos de humor, o de reflexión y no pueden faltar los momentos de alta emotividad en los que genera aún más simpatía. La película se enfoca en la familia, ese primer núcleo que conoce el ser humano y del cual desenvuelve su personalidad.
Stitch es también una mascota y tiene una forma de actuar similar a las de los gatos o de perros, dependiendo el momento y las necesidades de la historia. Su naturaleza extraterrestre le permite usar este tipo de comportamientos de manera indiscriminada. El también llamado “Experimento 626” es maleable y no obedece regla alguna (ni social ni física, lo cual es parte de su atractivo).
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Lilo y Stitch utiliza la acostumbrada fórmula Disney, que en realidad se puede aplicar para cualquier producción (el cine pretende mover sentimientos y generar pensamientos): llevar al espectador en una montaña rusa de emociones, creando una cadena de situaciones en las cuales se intercala humor con sentimiento, o tensión. Aunado a las exposiciones de los motivos de los personajes, se genera una empatía y un lazo, muchas veces permanente.
Otra cualidad del personaje es su sentimiento de exclusión; Stitch es un ser desadaptado, que no encaja con el común denominador social; en ocasiones, llega a ser rechazado por su propia familia, su “ohana”. Y, ¿quién de los millones de espectadores no se ha sentido así en alguna ocasión? El rechazo por parte del entorno y núcleos más cercanos son, a la vez, parte de la formación de una persona.
Parte del humor inherente en el pequeño alien, es que también llega a ser humorísticamente repulsivo y sus movimientos son similares a los de un insecto rastrero, más específicamente una cucaracha, enalteciendo su naturaleza de otro mundo.
No se puede omitir la importancia de la música en el filme de 2002, pues la producción evoca los grandes éxitos de una de las figuras principales en Estados Unidos: “El Rey” Elvis Presley. Estas producciones acostumbran usar versiones remasterizadas de las canciones, pues su objetivo primario es la reproducción a un alto volumen en las bocinas o parlantes del cine. Desde hace más de dos décadas, también se piensa para los reproductores caseros de audio y video que cada vez se expanden para obtener mejor calidad en ambos.
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El Experimento 626, que también asemeja a un oso koala, encuentra una familia desesperada por recuperar la armonía que alguna vez se tuvo y se perdió con la tragedia. Dos jóvenes hermanas quedan huérfanas tras el accidente automovilístico en el que mueren sus padres.
La adolescente Nani queda a cargo de Lilo, más se encuentran en la mira del organismo gubernamental a cargo de servicios infantiles, amenazando con llevarse a la más pequeña para adopción, si es que Nani no comprueba su capacidad para hacerse cargo de ambas. Lo que va moderadamente bien, sale de control con la llegada del Experimento 626 y, prácticamente, una invasión de otro mundo.
Lilo, tal como Stitch, es una pequeña que no es aceptada por su entorno, una paria, y quien tiene problemas para adaptarse a causa de la pérdida de sus padres y por su propia naturaleza hiperactiva.
A ritmo de los grandes éxitos de Elvis, la aventura de corta duración (apenas 85 minutos) basta para ganarse definitivamente un lugar en el corazón del auditorio.
La banda sonora fue compuesta por el conocido Alan Silvestri y contiene dos temas originales, además de un excelente cover (nueva versión) con la cantante de country, Wynonna, y un magnífico arreglo. La voz de la cantante de Kentucky se puede apreciar en “Burning Love”, que aparece en los créditos finales.
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“Stuck on You”, “Suspicious Minds”, “Heartbreak Hotel”, “(You’re the) Devil in Disguise” y “Hound Dog” son los demás temas de Presley que se incluyen en el disco y el filme, además de un cover de los A-Teens (un cuarteto vocal de jóvenes inspirados en ABBA), interpretando “Can’t Help Falling in Love” en una versión dance pop.
La producción de la película Lilo & Stitch fue una suerte de experimento, pues Disney deseaba regresar a cintas menos arriesgadas y de presupuesto más modesto; esto, después de que las inversiones fueran escalando con cada nuevo filme, no solo en Disney, sino en la industria hollywoodense en general. La llegada de las producciones animadas completamente por computadora, al estilo Pixar, ganaban terreno con una fuerza sin precedentes. Hoy en día, podemos decir que sustituyeron casi por completo a la animación tradicional.
Chris Sanders, creador del concepto en 1985 y quien da voz a Stitch, tuvo la oportunidad de presentar un proyecto, así que decidió utilizarlo. Sanders codirigió con Dean DeBlois, quien también coescribió en lo que fue su primer trabajo importante (ambos habían sido parte del grupo de escritores en Mulan, de 1998).
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Lilo & Stich es peculiar también en su animación; la técnica era un regreso a aquella utilizada en las primeras producciones de Disney, como Blanca Nieves (1937), Pinocchio (1940) o Dumbo (1941), en la que se empleaba la técnica de acuarela para todos los fondos, contrario al gouache de más reciente uso.
Lilo & Stitch utilizó una innovadora manera de promoción, haciendo parodia de los propios filmes de Disney en los avances de cine. Los trailers interrumpían el flujo de otras historias, como La bella y la bestia, La sirenita, Aladino y El rey león.
Mucha creatividad y estrategia se conjugaron en el momento exacto para fundamentar a Lilo & Stitch como una redituable franquicia en Disney, misma que fue tomando importancia por medio de los formatos caseros y que cumple 20 años, al haberse estrenado el 21 de junio de 2002… Una película que tenía relativamente poco que perder y que sigue ganando.
