A veces pensamos que el uso de las tarjetas de crédito es como un hoyo negro, del que difícilmente o tal vez nunca podrás salir.
No tiene que ser así, si las usas adecuadamente pueden ser un impulso y no un lastre.
Los errores más comunes entre quienes usamos las tarjetas de crédito son:
- Comprar indiscriminadamente como si no lo tuviéramos que pagar después, a veces en cosas que ni necesitamos.
- Sacar dinero en efectivo de una tarjeta para pagar el mínimo de la otra. El interés por disposición en efectivo es altísimo y lo único que se hace es estos casos, como se diría coloquialmente, “hacer un hoyo para tapar otro”.
- Pagar solo el mínimo de la tarjeta de crédito, ya que de esta manera no estamos abonando al capital y la mayor parte de nuestro pago se va a intereses.
- Comprar a meses sin intereses y no pagar a tiempo, en la mayoría de estos casos se vuelve exigible la totalidad del crédito de golpe, lo que puede dañar seriamente tus finanzas, más todo el cargo de intereses por no pagar en tiempo.
- No hacer un comparativo entre los costos del CAT según el tipo de tarjeta que utilizamos, algunas tienen intereses altísimos, esto lo puedes consultar en la CONDUSEF.
Que no cunda el pánico, tu tarjeta de crédito no tiene que ser un instrumento del mal, ni el hoyo negro del que jamás podrás salir.
Con algo de planeación y estrategia puedes aprovechar los beneficios de contar con una tarjeta de crédito.
Vicente López Portillo, experto en finanzas personales recomienda lo siguiente:
- Paga en tiempo tu tarjeta, preferentemente no lo dejes para el último día. Esto te ayudará a no generar intereses moratorios, ni otro tipo de gastos de cobranza que suelen ser bastante altos.
- Conviértete en totalero. Nunca pagues el mínimo de la tarjeta. De preferencia que tu pago sea el total de tu adeudo o cuando menos mayor al doble del mínimo. De esta forma tu pago no solo se queda en los intereses y abonas al capital, lo cual te permite concluir con el adeudo en un plazo menor de tiempo.
- Compra cosas que realmente necesites y que veas que tienes la capacidad de pagar.
- Si ya estás en que requieres hacer uso de tu tarjeta para apalancarte, hazlo después de tu fecha de corte.
Por ejemplo, si tu fecha de corte es el 3 de noviembre, haz tu compra el 4, lo cual se registrará hasta la siguiente fecha de corte, es decir el 3 de diciembre y lo podrás pagar cuando se vence esa fecha de pago, por decir hasta el 23 de diciembre. Ganas 50 días aproximadamente para realizar tu pago.
