El Buró Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos admitió haber adquirido el software de espionaje Pegasus durante la administración de Donald Trump, aunque supuestamente no habría sido utilizado.
En un comunicado publicado por el periódico The Guardian, la agencia de investigación explicó que la herramienta de vigilancia, creada por la empresa israelí NSO, fue comprada con un acceso limitado únicamente para hacerle una evaluación.
El FBI aseguró que el propósito de la prueba era analizar el funcionamiento del sistema, ante la preocupación de que pudiera caer en “manos equivocadas”. Sostuvo que jamás se utilizó en investigaciones criminales, ni en alguna otra situación.
En 2019, medios de aquel país informaron la adquisición del software por parte del FBI, aunque la agencia no se había pronunciado al respecto hasta ahora. El software está en la lista negra del Departamento de Comercio desde la administración de Joe Biden.
En julio del año pasado, una investigación periodística conocida como Pegasus Project reveló que con el spyware fueron intervenidos más de 50 mil números telefónicos en todo el mundo; entre los afectados destacaban periodistas, políticos y activistas. En el caso de México, unos 15 mil teléfonos fueron espiados, incluido el del presidente López Obrador y personas cercanas a él.
