Chiles, nueces de Castilla, granadas y un delicioso relleno, llegó la temporada de disfrutar de los más exquisitos chiles en nogada, una receta que además de ser muy mexicana, deleita al paladar más exigente y enamora con su aroma, color y sabor.
¿De dónde salieron?
La receta se le atribuye a las madres del Convento de Santa Mónica en Puebla, que en 1821, al saber de la presencia de Don Agustín de Iturbide para celebrar su santo, decidieron elaborar un platillo que incorporara los colores de la bandera del Ejército Trigarante, siendo además el mes en el que las nueces de Castilla son cosechadas junto con las granadas; pero en un recetario de la familia Traslosheros también de Puebla, se encontró una receta fechada anterior al año 1821, ¿de quién fue la idea?, no lo sabemos, lo cierto es que son deliciosos.
¿Pero qué son?
Es un platillo con casi 200 años de tradición, típico de septiembre y sus colores, que obedece a la cosecha natural de sus ingredientes principales, los chiles poblanos que se utilizan deben estar asados y pelados, rellenos de un picadillo de cerdo, jitomate, cebolla, ajo, frutas de estación, nueces, almendras, piñones y especias. La salsa debe tener las nueces, queso, leche, azúcar y jerez; la decoración exquisitamente vistosa es con granos dulces de granada y un poco de perejil picado.
No se debe opacar su sabor con bebidas fuertes o dominantes, idealmente para acompañar se sirve un vino blanco, dulce o afrutado, incluso uno rosado.
¿Cuántos me puedo comer?
¿De cuántos traes ganas?, cada chile aporta al menos unas 770 kilocalorías, ahora que si lo comes sin capear, se queda en 400 kilocalorías aproximadamente. Aproximadamente en el 2011, cada chile costaba entre 90 y 300 pesos, al día de hoy el precio va desde los 150 a los 500 pesos.
¿De dónde son los mejores?
Esta parte del artículo, la escribes tú, compártenos tus lugares y recetas favoritas…
