Desde antes que asumiera la Presidencia de México, el 1 de diciembre de 2018, Andrés Manuel López Obrador ya había proferido frases contra el presidente estadounidense Donald Trump por su trato grosero a los mexicanos.
Antes de esa fecha, consolidado como un líder de la corriente de izquierda mexicana, Lopez Obrador llamó a demandar a Trump por su política racista.
El 20 de enero de 2017, cuando Trump asumió el poder en Estados Unidos, López Obrador expresó que el estadounidense “significa en la política exterior de los Estados Unidos una vulgar amenaza a los derechos humanos” por su intención de construir un muro fronterizo.
“Que de inmediato se presente una denuncia en Naciones Unidas contra el Gobierno de Estados Unidos y contra Donald Trump por violación de derechos humanos y por discriminación racial”, exigió el tabasqueño al gobierno de Enrique Peña Nieto el 1 de febrero de 2017.
“Trump azuza el racismo. Está en contra de los extranjeros, pero tampoco es que lo sienta así. Es una estrategia política, pero nos ha hecho mucho daño”, opinó el 8 de mayo de 2017 en una entrevista con el periodista Jorge Ramos.
Ya como precandidato presidencial de la coalición Morena-PES-PT, el exjefe de Gobierno de la Ciudad de México soltó a la prensa nacional: “Pondré en su lugar a Trump”; en ese mensaje propuso una política no injerencista con los gobiernos del mundo.
Sin embargo, cuando López Obrador ganó la elección presidencial en julio de 2018, optó or cambiar el discurso y buscar llegar a acuerdos que beneficien a ambos países.
El presidente Trump respondió de forma inteligente a ese pronunciamiento con un categórico entendimiento mutuo, mayor que con Enrique Peña Nieto.
Empero, a mediados de 2019 el mandatario estadounidense rompió el “pacto de caballeros” al amenazar con imponer aranceles de cinco por ciento a productos mexicanos.
Su homólogo mexicano respondió con una valentonada convertida en misiva: “Recuerde que no me falta valor, que no soy cobarde ni timorato, sino que actúo por principios”.
Y continuó: “No creo en la Ley del Talión, en el diente por diente ni en el ojo por ojo porque si a esas vamos, todos nos quedaríamos chimuelos y tuertos”.
Andrés Manuel López Obrador inicia esta mañana en Washington una serie de reuniones con el presidente Trump y su Gabinete, con motivo del tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que entró en vigor el 1 de julio pasado.
Esta visita es la primera salida al extranjero de López Obrador desde que asumió la Presidencia de Mexico, el 1 de diciembre de 2018.
