Por fin, después de muchos intentos, el avión presidencial será vendido. Así lo anunció el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien detalló que se llegó a un acuerdo con el gobierno de Tayikistán para entregárselo, a cambio de la nada desdeñable cifra de mil 658 millones 684 mil 400 pesos.
En un video que difundió en sus redes sociales, el mandatario se mostró contento por concretar la venta de la aeronave, de la cual se quería deshacer desde su primer día de mandato.
“Después de mucho tiempo, se logró vender este avión. Estamos contentos, estamos como los nuevos ricos que compran un yate o un avión como este y son felices solo el día que lo estrenan y el día que lo venden”, dijo el presidente.
En doce horas cayó el depósito de los tayikos, por lo que el tabasqueño ya decidió en qué se va a usar el dinero: se va a entregar al Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, para construir dos hospitales de 80 camas. Uno de ellos estará en Tlapa, Guerrero, y el otro en Tuxtepec, Oaxaca; la idea es tenerlos listos para antes de que acabe su sexenio.
Y es que cabe recordar que el avión, un Boeing 787 bautizado como “José María Morelos y Pavón” fue adquirido por Felipe Calderón en el último año de su gobierno, por 218 millones de dólares. La aeronave la utilizó Peña Nieto, pero fue hasta la llegada de AMLO cuando se quedó parado en un hangar de California.
Y ahí se mantuvo, mientras el presidente se lo ofrecía a medio mundo o ideaba una forma de sacárselo de encima. Que si primero una rifa, luego que un intercambio con Estados Unidos por helicópteros militares, e incluso llegó a ofrecerlo en renta para bodas y quince años. Pues no, finalmente, el avión volará hacia el sur de Asia.
