Entradas y salidas. Inicios y finales. Los comics se manejan comúnmente de esa manera al ser un medio seriado. Para los X-Men, la llegada de The Phalanx, fue todo eso.
No solamente se trató del inicio de una historia, también fue un cambio estructural.
El año era 1994 y los comics de mutantes seguían fuertes. Los eventos anuales (crossovers) eran los más importantes para la línea, dado que era cuando más ventas registraban. Y aún lo siguen siendo.
Después de Fatal Attractions, el evento anterior y del cual ya hablamos, debía prepararse el siguiente. Las semillas fueron plantadas en un par de comics, Uncanny X-Men #312 y #313, sin mucha fanfarria.
Estos números también son importantes, pues también establecen al nuevo ilustrador oficial de la revista, que tampoco es anunciado en ese momento como tal.
El par de números muestran a unos extraterrestres que ya habían dejado sentir su presencia en la Tierra. Algunas pistas se habían mostrado en números anteriores de la revista y en Excalibur.
The Phalanx, es una especie de colectivo cuyo organismo es un virus parásito techno orgánico. Esto quiere decir, un agente patógeno vivo que se invade a una víctima y la convierte en una especie de máquina viva.
Un conocido miembro de The New Mutants, Warlock, pertenecía a este tipo de seres (en una variante conocida como Technarchy), así como su maligno padre, Magus. Warlock había fallecido años atrás, en el evento llamado The X-Tinction Agenda.
Años más tarde, surgió Douglock, constituido por el mismo tipo de organismo, y que era una amalgama de las esencias de Warlock y de su mejor amigo, Douglas Ramsey, Cypher, también fallecido, durante el crossover, Fall of the Mutants.
The Phalanx se alimentan de la materia viva y no acaban con la vida de su presa, sino que se adueñan del cuerpo de su huésped. Su intención es expandirse por todo el universo, un planeta a la vez.
En New York, Storm, Yukio y Gambit tienen un primer encuentro frontal contra esta mortífera especie. Algunos enemigos del pasado de los X-Men, han sido absorbidos de la misma manera que Douglock, como Steven Lang y Cameron Hodge (responsable de la muerte de Warlock).
En casa, los X-Men tienen otros problemas, pues hallan inconscientes a Iceman y a Emma Frost, enemiga y prisionera del equipo. Charles Xavier, Beast, Bishop, Banshee y Jubilee, están a punto de descubrir que, debido a un extraño accidente, Bobby y Emma han intercambiado cuerpos. Otro prisionero, Sabretooth, no pierde la oportunidad de inquietarlos.
The Phalanx Covenant, comenzaría dos meses después y tendría su desarrollo en los comics de X-Men, Uncanny X-Men, Excalibur, X-Force, X-Factor, Wolverine y Cable. De ellos hablaremos pronto.
La historia previa de dos números cuenta con el dibujo de Joe Madureira, entonces un muy joven ilustrador brasileño, que sorprendía con su arte altamente influenciado por las corrientes japonesas del anime y el manga. Era un estilo bastante más simplificado que el que reinaba en los comics de la época y uno muy popular en el orbe.
“Mad”, como se le apoda a Madureira, fue reclutado por el editor Bob Harras, quien lo asignó al comic más vendido de Marvel. Harras es conocido por su buen ojo para los artistas, así como por su poco ortodoxo manejo en el medio. Por ejemplo, abrió las puertas a Madureira, al mismo tiempo que despidió a John Romita Junior, el dibujante titular de Uncanny X-Men, sin avisarle siquiera.
Romita había sido solicitado por Frank Miller para ilustrar la miniserie, Daredevil: The Man Without Fear. Harras le permitió hacerlo y le dijo que su lugar estaba asegurado como dibujante de Uncanny X-Men. Entonces, Romita se enteró por otros medios, que Madureira había sido nombrado el ilustrador oficial.
Romita Junior, no peleó por el puesto y regresó a dibujar Spider-Man, además del crossover entre Batman y The Punisher, Deadly Knights.
Madureira comenzó oficialmente con Uncanny X-Men #316, primera parte de The Phalanx Covenant, continuando con el siguiente y no regresó sino hasta el #325. Pero esto tiene una explicación.
El brasileño fue uno de los diseñadores principales en Age of Apocalypse, un evento donde todos los comics de mutantes fueron cancelados y reemplazados con versiones situadas en una realidad alterna. Madureira ilustró los cuatro números de The Astonishing X-Men, el título que sustituyó a The Uncanny X-Men.
Uncanny X-Men #312, cumple 30 años de su publicación.
Antes de irme, te presento la nota de Agenda de extinción (The X-Tinction Agenda):
La caída de los mutantes (Fall of the Mutants):
Un recuento de importantes cambios en el comic de Uncanny X-Men y otros:
Y Daredevil: The Man Without Fear, por Frank Miller y John Romita Jr:
