La cinta Pobres criaturas, galardonada en los recientes premios Oscar, aborda temas complejos, aquí hablaremos de algunos.
La temporada de premios trae consigo cintas que temáticas diferentes, irreverentes y que invitan al espectador a pensarse más allá de sí. Historias que despiertan emociones y pueden volverse una cinta que se crea expectativas y una reputación no solamente durante la temporada de premios, sino que trasciende en el tiempo y puede llegar a volverse una cinta de culto.
El director Yorgos Lanthimos se ha vuelto en los últimos años, un director con una visión clara y específica en sus cintas, las cuales juegan con lo bizarro y lo surrealista.
No es de sorprender que las cintas del director hayan tenido mayor relevancia a lo largo de estas últimas temporadas de premios, ya que son cintas disruptivas, que ponen en el centro la humanidad y su relación con la sexualidad, películas que han dado de qué hablar.
Las Pobres criaturas de Yorgos Lanthimos
En Pobres criaturas se retrata la historia de Bella Baxter, una mujer que es infeliz con su vida y decide suicidarse pero es revivida con la mente de su bebé a manos del doctor Goodwin Baxter. La obra está basada en la novela homónima de Alasdair Gray, la cual fue publicada en 1992.
A modo de un Frankenstein femenino, Bella Baxter nace como un “experimento” del doctor, de esta forma, Bella comienza a conocer el mundo, desde comenzar a hablar, aprender a caminar, aprender a comportarse, hasta conocer los placeres, las fortunas, condiciones y peripecias del mundo.
El primer punto con el que el director juega es el elemento del descubrimiento, un descubrimiento desprovisto de alegatos morales, normas sociales y preconcepciones de la sociedad.
De esta manera, Bella se inserta conocer y descubrir un mundo sin las pretensiones del mundo, por lo que mientras comienza a encontrarse con el exterior y consigo misma, se despega de las condiciones normativas impuestas por la sociedad, como el es rol de la mujer o su acceso al conocimiento.
Por otro lado, el director tiene una visión clara de Bella, quien pasa de ser una niña que cree en su conocimiento empírico a adoptar su autonomía y romper con los paradigmas que la sociedad conservadora impone.
Una versión victoriana
Algo que tiene en cuenta es que lleva la cinta en dos ejes paralelos, por un lado el choque y rompimiento que tiene Bella con su constante devenir en el mundo, por el otro, la estética victoriana y steampunk que refleja el surrealismo de la historia y que sirve a manera de reflejo del ser de la protagonista, pues la escenografía, la estética y el vestuario reflejan el estado anímico de Bella.
En una primera instancia, los escenarios son en blanco y negro, en espacios cerrados y conocidos, una forma de reflejar que Bella está explorando.
Pasamos a colores vivos, ciudades empaquetadas por una estética con aire victoriano pero con toques del siglo XX, como el art noveau y la estética de las primeras décadas del siglo.
Al final, resulta un collage que refleja a la protagonista, entre los constructos sociales de la sociedad inglesa del siglo XIX y la apertura de encontrarse consigo misma.
La sexualidad: un tema tabú
Uno de los temas que más explora el director, no sólo en esta película sino a lo largo de su obra, es la sexualidad.
Para el director, mostrar la sexualidad sin tapujos es un ente conductor en la historia, pues atribuye a la sexualidad como un elemento inherente de la humanidad.
En el caso de Pobres criaturas, está la cúspide de la sexualidad, ya que constantemente pone a la protagonista a ver su sexualidad sin los tabúes o las ideas inscritas en ella, aunque esto tiene un lente muy delicado, pues puede caer en el morbo y en la crítica, como justo ha sucedido con esta cinta.
Es una cuestión compleja, ya que Lanthimos no es nuevo en este ejercicio. En el caso de Bella, la sexualidad es uno de los descubrimientos que hace, pues es en ella donde encuentra respuestas ante la mirada patriarcal con la que la sociedad ha condicionado a las mujeres.
Algo que sí destaca el director, es en denotar que la sexualidad no es un elemento gratuito, sino que se presenta como una condicionante en las actitudes de los personajes. En este caso, Bella haya en su sexualidad el rol de las mujeres y lo que quiere para ella, que significa el rompimiento con la heteronormatividad y lo prototípico.
La cinta fue ganadora del Globo de Oro a mejor película de comedia o musical, el León de Oro en el Festival de Venecia y recientemente ganó cuatro Oscars
