De algunas películas se dice que las segundas partes son las mejores. Esta polémica aseveración ha sido motivo de debate durante mucho tiempo. En el caso de Empire Strikes Back, el argumento tiene buen fundamento.
Si tomamos en cuenta que Star Wars en 1977 tuvo mucho de suerte (sin demeritar) y pudo haber fracasado, para 1980 era uno de los universos favoritos de mucha gente, grandes y chicos. Si “El Imperio Contraataca” no hubiera sido tan buena, podría haber terminado ahí el fenómeno.
La secuela que se estrenó en Estados Unidos el 21 de mayo de 1980; fue una expansión al incipiente universo de ciencia ficción que conocíamos por su primera entrega. Se presentaron, además del elenco original, personajes nuevos como Lando Calrissian, Yoda y el cameo del Emperador Palpatine (que no tenía nombre completo aún). Incluso la música tuvo un giro pues se incluyó uno de los temas más memorables de la saga: La marcha imperial de John Williams que resulta casi imposible de creer, no existe en la primera cinta.
El icónico texto introductorio probablemente confundió a los fanáticos y espectadores casuales, ya que anunciaba que era el “Episodio V”. ¿Y los primeros 3? Hecho que se resolvió cuando al año siguiente, el 10 de abril se reestrenó en cine la ahora llamada Star Wars: Episodio IV, retitulada como “Una Nueva Esperanza”. Se hablaba entonces acerca de una serie de cintas: una saga de 9 partes (en realidad, sólo se lanzaron tres durante más de 20 años).
En el aspecto visual, para Empire Strikes Back se presentaron muchas mejoras y se progresó en la presentación de diversos mundos, a veces visualmente contrastantes con los pocos conocidos previamente. Entre las nuevas inclusiones se encontraba el planeta gélido de Hoth (“hot” en inglés, es “caliente”, lo contrario). El sistema Dagobah, refugio de Yoda, pantanoso, húmedo y probablemente maloliente. Y la paradisiaca isla flotante de Bespin, donde Calrissian es regente.
Por primera vez, en Empire, vemos un encuentro cara a cara entre Darth Vader, Han Solo y Chewbacca, además de volver a enfrentar a Leia y Luke. El filme es más obscuro y con un final no común para esos días: los “buenos” perdían y la historia quedaba inconclusa. Habría que esperar dos años más para conocer el desenlace.
La ventaja de las secuelas, es que además de no tener que establecer todos los elementos para desarrollar una empatía entre la audiencia y los personajes, generalmente cuentan con un mayor presupuesto y más confianza por parte de las productoras. Esto es claro en la cinta de 1980.
Los tres filmes de Star Wars tuvieron su auge y un decaimiento durante los últimos años de la década de los 80’s y parte de los 90’s. Aun así, el amor por los fans permanecía. Fue en el marco del 20 aniversario, en 1997, que relanzaron en cine las películas originales, pero con renovaciones de efectos especiales y una que otra escena agregada. A su vez, se lanzaron a la venta por vez primera en la historia, primero, como la trilogía original y posteriormente con la Edición Especial. En el caso de Empire, tal vez la nueva edición sea la mejor pues no interfiere con la historia original y sí cumple en el aspecto estético. Mejores paisajes, subsanación en algunos efectos pasados de moda o demasiado notorios, también fue contribución a la buena reputación con que cuenta la cinta actualmente.
Empire Strikes Back de 1980, dirigida por Irvin Kershner, ya cumple 40 años.
Por otro lado, se cumplen 15 años de que llegó el final de la segunda trilogía (que inició en 1999) con Episode III: Revenge of the Sith, el 19 de mayo de 2005.
En esta película, George Lucas mostró el puente entre la entonces nueva trilogía y el Episodio IV: Una Nueva Esperanza (que años más tarde uniría magistralmente Rogue One).
Los primeros tres capítulos de Star Wars resultaron polémicos pues tuvieron que enfrentarse a la nostalgia de los fans y la buena calidad de las primeras cintas. Sin embargo, en este filme se presentan muy buenos datos, como el fin de la orden Jedi, los destinos de Yoda, Palpatine, Obi-Wan, Padme y, principalmente, de Anakin Skywalker, a quien se eligió como personaje principal de toda la saga.
Los efectos especiales y el score no tienen queja alguna. Es buena cinta para los completistas de Star Wars y algunas nuevas generaciones que crecieron con dicha nueva trilogía para tomarla como su preferida.
Como sea, Star Wars es un suceso cultural y cinematográfico que revolucionó y recordamos dos de sus aniversarios, el de Star Wars Episode V: Empire Strikes Back a 40 años y Star Wars Episode III: Revenge of the Sith, a 15.
