La tecnología nos brinda incontables ventajas, pero también ha traído sus inconvenientes. Uno de los que más se ha hablado es el de la inactividad física por parte de los jóvenes. Esto ha cobrado relevancia a nivel mundial y se ha convertido en un problema que amenaza con tener consecuencias fatales.
De acuerdo con un estudio llevado a cabo en 38 países y publicado en la revista The Lancet, los problemas derivados de la falta de ejercicio físico y el sedentarismo son responsables de más de 5 millones de muertes cada año a nivel mundial y suponen unos 54 mil millones de dólares de gasto en salud. La cifra no es exclusiva de los jóvenes, no obstante, el alto porcentaje de sedentarismo en este sector de la población lo pone en un riesgo latente.
Según la publicación, el nivel de actividad física en los adolescentes se ha estancado desde 2012 y un 80% de los jóvenes no sigue la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de hacer una hora de ejercicio al día. Antes de la pandemia de COVID-19, un 40% de los escolares nunca iba a pie al colegio y un 25% pasaba más de tres horas al día sentado después de asistir a clases y completar sus deberes.
El estudio indica que este estancamiento se debe en gran parte a la digitalización de los últimos años. La revolución tecnológica en la que se ha incrementado el uso de pantallas implica un incremento en el nivel de sedentarismo. Este problema viene de años atrás, aunque con la pandemia de coronavirus se ha acentuado.
La investigación resalta que el ser humano no está diseñado para estar sentado, pero aun así en la mayoría de los países se ha adoptado el sedentarismo como parte del desarrollo. Concluye llamando a las autoridades de cada nación para crear estrategias que aumenten la participación ciudadana en actividades deportivas y estudiar su impacto en términos de salud.
