Los libros de texto y la nueva escuela mexicana son cambio profundo en la educación: Manuel Gil
Los nuevos libros de texto gratuitos forman parte de la propuesta de la Nueva Escuela Mexicana en la que va a haber una diferencia entre evaluar y acreditar; y en la que se enseñará por proyectos, de modo que la enseñanza será más atractiva y activa para los estudiantes, aseveró Manuel Gil Antón, profesor del Centro de El Colegio de México.
Al hacer un análisis sobre los recién publicados libros editados por la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos, Gil Antón aseguró que la educación por problemas y por proyectos genera una mejor actitud hacia el aprendizaje.
Esta nueva propuesta de educación, destacó, es una transformación profunda del sistema educativo nacional, en el que se aprenderá con problemas reales.
“La propuesta es una transformación profunda del sistema educativo nacional porque en lugar de continuar con el trabajo pedagógico en las aulas a través de asignaturas, dado que la realidad no está dividida por las disciplinas que hemos inventado los seres humanos, sino que conjunta diversos saberes populares, científicos de todo tipo; lo que propone es que sin que desaparezcan los grados, por ejemplo en la primaria, ya que primero y segundo tienen unos objetivos, tercero y cuarto otros, quinto y sexto otros pero sobre todo es una educación que derivada de la pedagogía crítica que es en cierto modo a la escuela activa, la escuela que propusieron del espectro de la izquierda las propuestas de Paulo Freire, la maestra (María) Montessori.
“Se concibe que se aprende mejor si en vez de pasar de una hora por tema, todo aislado, se decide un problema específico que interese a los estudiantes a los niños, a las niñas, a los adolescentes, de tal manera que, por ejemplo, si se elige el cambio climático, el cambio climático va a implicar aumento de la temperatura, (se enseñaría la) Física; se reducen los polos, (se emplearía la enseñanza de la) Geografía, y también cuando se dice que se aumenta la temperatura hay elemento aritméticos para hacer eso”, explicó.
En este sentido destacó que la educación activa es claramente un proyecto educativo muy importante que, junto con la propuesta de una escuela no clasista y no racista, no se puede dejar de lado.
¿Educación sexual?
En torno a la discusión sobre si en la escuela se debe enseñar o no sobre sexualidad, Gil Antón consideró que es imprescindible que los menores de edad aprendan más allá de si los órganos reproductivos femeninos y masculinos son solamente para la reproducción, el contagio de las enfermedades por contacto sexual o el placer.
“Están diciendo que no aceptan la perspectiva de género; ante eso lo que tenemos son cosmovisiones diferentes y yo no voy a dejar de defender la estructura constitucionalmente establecida, sobre todo, en un país que tiene cientos de miles de violencias, muchísimas violencias feminicidas y muchísimas violencias de parte de adultos a niños. La educación sexual es para ser mejores seres en la vida y para defendernos de esa violencia”, argumentó.
Lo que ocultaban los libros de texto
Gil Antón recordó que, en las últimas 70 décadas, los libros de texto gratuitos habían ocultado temas como los distintos fraudes electorales, el “embarazo” de urnas en las elecciones presidenciales, la represión militar hacia los estudiantes en 1968, así como la participación de los profesores en la guerrilla.
“Se calló durante décadas que la elección del presidente era como una especie de Tlatoani”, recordó.
Propuestas
El académico sugirió que, para implementar la nueva escuela mexicana, tal como se propone, se tendrían que renovar los planes y programas de estudio de las escuelas normales de maestros. Además, es necesario capacitar a los 2 millones de profesores en activo que tiene México.
