Cuando se dio a conocer, fue todo un fenómeno. El año era 1992 y el material del que hoy hablamos fue benéfico, tanto para la cadena de videos MTV como para la carrera profesional del músico británico. Es Eric Clapton: MTV Unplugged.
MTV llevaba algunos años presentando un tipo de conciertos acústicos, en el que los músicos debían prescindir de todo aquel instrumento eléctrico para realizar algo más íntimo -no necesariamente más sencillo- y en el que lucieran sus habilidades de manera natural.
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La propuesta fue exitosa y varios intérpretes obtuvieron reconocimiento de estas presentaciones que eran transmitidas copiosamente en el canal, además de que algunas de ellas eran comercializadas en video y en formato de audio. Algunos famosos, como Aerosmith y Paul McCartney ofrecieron conciertos sensacionales; algunos menos conocidos, como Mariah Carey, despuntaron con mayor facilidad gracias a la exposición que les dio este medio. Entonces llegó Clapton.
Los conciertos eran grabados con poco público, a media luz y en un escenario pequeño, lo que facilitaba las condiciones de comunión entre los músicos y su audiencia. Esa conexión es palpable en la grabación de Clapton.
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Eric Clapton, rockero británico que participó con grandes como John Mayall, también formó parte de agrupaciones como The Yarbirds, Cream y Derek and the Dominos. Como solista, se hizo de buena reputación con varios materiales. Y con el concierto acústico para MTV, cimentó su nombre permanentemente como uno de los más grandes. Te presento una reseña del álbum de Clapton con Mayall:
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Y no es para menos, escuchar esta presentación es toda una cátedra de música. Las adaptaciones que Clapton y su grupo hacen de temas clásicos, tanto de él como de otros grandes, son innovadoras y con mucha identidad. En ocasiones, parecen canciones totalmente nuevas.
Entre las composiciones que resaltaron a nivel comercial, fueron “Tears on Heaven”, un tema dedicado al hijo de Clapton, Conor y que fue presentado por vez primera como parte del soundtrack para la película Rush de 1991. La versión original es prácticamente idéntica a la que se escucha en el Unplugged.
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En contraste, “Layla” cambia considerablemente y desde ese momento se volvió la versión definitiva para muchos. La original, escrita por Clapton y Jim Gordon, fue grabada por Derek and the Dominos y aparece en el único disco del grupo, de 1971. “Layla” acústica prescinde del puente final instrumental y reduce su velocidad e intensidad vocal.
Otra fantástica reinterpretación es la del tema de Clapton y Robert Cray, “Old Love”, una larga versión en la que, tanto el piano como la guitarra tienen su oportunidad para expresarse en dos puentes musicales. La primera versión aparece en la placa del 7 de noviembre de 1989, Journeyman.
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Un tema que debutó en el concierto Unplugged y no fue incluido, es “My Father’s Eyes” que, tiempo más tarde, llegaría a ser sencillo promocional para Clapton. El tema puede ser escuchado en la edición de 2013, Unplugged: Expanded & Remastered, así como en “Circus” y “Worried Life Blues”.
“My Father’s Eyes” y “Circus” aparecen en el álbum de 1998, Pilgrim.
El concierto acústico (o “Desenchufado”, como decían los VJ’s de MTV Latino) comienza con el bello tema instrumental “Singe”, de la autoría de Clapton. Otro tema del guitarrista que se escucha posteriormente es “Lonely Stranger”.
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Clásicos del blues, algunos de ellos antiquísimos, se aprecian en adaptaciones con estupendos arreglos. Entre los que se pueden escuchar, está “Malted Milk”, de la leyenda Robert Johnson, a quien Clapton le dedicó un álbum entero y quien ha sido influencia para miles de músicos.
Clapton y su banda (comprendida por Andy Fairweather Low en guitarra, mandolina y armónica; Chuck Leavell en el piano y armonio y Nathan East, en coro y bajo) se adueñan de composiciones como “Before You Accuse Me” (de Ellas McDaniel), “Hey Hey” (Big Bill Broonzy), “Nobody Knows You When You’re Down and Out” (de Jimmy Cox), “Running on Faith” (de Jerry Lynn Williams) y “Rollin’ and Tumblin'” (de Muddy Waters).
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El MTV Unplugged de Eric Clapton es un enorme álbum de blues acústico y una muestra del inglés como uno de los grandes músicos de su generación. Este formidable material de rock y blues cumple 30 años de haber sido dado a conocer.
