El disco debut de Rob Zombie, en realidad no lo parece tanto. Es Hellbilly Deluxe: 13 Tales of Cadaverous Cavorting Inside the Spookshow International, y se dio a conocer hacer 25 años.
Como otros álbumes de Zombie, el material ostenta un largo nombre y ese es parte de su encanto. La traducción sería algo así como “Hellbilly, De lujo: 13 relatos de retoces cadavéricos al interior del espectáculo espectral internacional”. O algo similar.
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Hellbilly, es un juego de palabras (de los muchos que hace Zombie), refiriéndose a “hillbilly”, una persona de poca educación, normalmente residente en las áreas remotas de Estados Unidos, tal vez viviendo en un camper y, sí, es un término humorístico y peyorativo. “Hellbilly” sería algo similar, pero proveniente o residente en el infierno.
De alguna manera, el lanzamiento como solista de Rob Zombie tuvo mejores ventas que los previos materiales con White Zombie, banda que estaba en ascenso cuando llegó a su final, básicamente, porque Rob tomó otro camino. Una última grabación con el colectivo se dio a conocer en 1995, Astro-Creep: 2000 – Songs of Love, Destruction and Other Synthetic Delusions of the Electric Head. Tres años después, Rob navegaba solo.
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En Hellbilly Deluxe: 13 Tales of Cadaverous Cavorting Inside the Spookshow International, como el título lo dice de manera franca, al interior encontramos 13 canciones, o relatos, de diversas temáticas.
Normalmente, vemos películas de terror con buenas bandas sonoras. Rob Zombie hace una propuesta a la inversa, escuchar historias de terror con música para que nuestra mente nos permita imaginar lo demás.
La introducción anuncia con la voz de una pequeña niña, todo lo que debemos de saber del contenido del álbum, El track en cuestión lleva por nombre, “Call of the Zombie”: “Proveniente de la obscuridad, el zombie llamó; dolor verdadero y agonía les llevó. Los niños corrieron para esconderse debajo de sus camas por miedo a que el diablo les cortara la cabeza”.
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Las canciones de Rob Zombie se han malinterpretado como satánicas; sin embargo, son cuentos de terror. El músico, compositor, cantante, actor, director y productor (más lo que se acumule en la semana), es fanático de este género en todas sus vertientes.
Hellbilly es un magnífico debut que no nos deja extrañar demasiado la ausencia de White Zombie. Sus canciones son rítmicas y pegajosas, en el género del metal industrial que se sigue escuchando actual, pese el tiempo transcurrido desde su liberación. Los arreglos son elaborados, apoyados por las distorsiones y los efectos ambientales y con frases cortas que nos remiten a los seriales de terror televisivos en blanco y negro.
Los singles de Hellbilly ayudaron a darle promoción positiva al material. Estos fueron, “Dragula”, “Living Dead Girl” y “Superbeast”.
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Como buen amante de la literatura y el comic, el libreto del álbum contiene arte hecho por el propio Zombie, además de Gene Colan, uno de los grandes del medio, conocido por trabajos en revistas como Daredevil y Tomb of Dracula.
El tercer ilustrador es Dan Brereton, quien también gusta del horror y lo sobrenatural. Entre sus propuestas se encuentra el también recomendable comic, Nocturnals.
Hellbilly Deluxe: 13 Tales of Cadaverous Cavorting Inside the Spookshow International, salió a la venta el 25 de agosto de 1998.
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Ahora te ofrezco otras notas del siempre amable Rob Zombie, una peli y su banda sonora:
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The Electric Warlock Acid Witch Satanic Orgy Celebration Dispenser:
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Educated Horses:
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El último de White Zombie, Astro-Creep 2000:
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Y, ahora sí, por último, un genial tributo a The Ramones en que el Zombie metió sus garritas (como en el arte de portada):
